Ya antes de que Sergio Massa pronunciase que : «desde mañana la responsabilidad de dar certeza es de Milei» el dólar cripto reflejó el punto de vista de una parte del mercado financiero.
Con el dólar cripto oscilando en $1.150 (el blue había cerrado en $950 el viernes) y aún antes de que el futuro presidente Javier Milei pronunciase su discurso, la expectativa de otro movimiento alcista de dólar dominó las primeras horas posteriores a la difusión de los datos del balotaje.
El Presidente electo le contestó al ministro pasando por arriba los próximos 19 dias y fijando al 10 de diciembre como la fecha de comienzo de su mandato.
Si un postulado mantuvo en firme en los días previos a la elección el lider libertario ese fue el de la dolarización, sin embargo, en su primer discurso después del triunfo no mencionó el tema.
El Presidente electo habló más de libertad, de cumplir los compromisos asumidos por el Estado y de respetar la propiedad privada que de definiciones para el corto plazo.
La discusión sobre el camino hacia una dolarización o un esquema bimonetario está marcado por la evolución de dos variables clave: cuantos dólares puede conseguir Milei en el exterior para dolarizar y cómo piensa digerir, sin provocar una explosión de liquidez, los $20 billones que están atrapados en Letras de Liquidez (Leliqs).
El riesgo de comenzar a liberar los pesos que están en las Leliqs, sin una demanda efectiva de pesos por parte de la gente, podría generar un corrimiento al dólar desatando otro salto de la inflación que ya viaja al 140% anual.
Milei, un detractor declarado en campaña de los pesos, tiene ante sí el desafío de tener que proveerlos para permitir en diciembre el pago de sueldos, aguinaldos y vacaciones. ¿Tendrá otra alternativa que imprimirlos?.
Massa le tiró una zancadilla al Presidente electo y ya anoche se especulaba con una reunión entre economistas de Milei y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, para darle un marco de referencia a la apertura del mercado cambiario el martes.
La danza de nombres para ocupar puestos clave en el área económica se circunscribe, por ahora, al ex ministro Luis «Toto» Caputo (impulsado por Mauricio Macri), Emilio Ocampo, virtual presidente del Banco Central a partir de diciembre, el ex presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, el financista Dario Epstein ,Nicolás Cachanosky autor junto a Ocampo del libro «Dolarización: una solución para la Argentina» y Horacio Liendo que elaboro un plan «bimonetario» para Patricia Bullrich y que en los últimos días se lo acercó a Milei.
Federico Sturzenegger estuvo reunido el viernes cuatro horas con Javier Milei.
Desde ese momento, una parte del entorno del libertario apostó a que sería el próximo ministro de Economía, pero a las pocas horas los mismos que dieron la noticia empezaron a bajar la expectativa.
El motivo principal del encuentro fue que Sturzenegger, a quien Milei llama por el apodo de «Coloso», le presentó un conjunto de proyectos de ley para «eliminar más de 100 leyes» que en la actualidad favorecen lo que denominaron «la burocracia estatal».
De ese paquete de proyectos surgirán los proyectos de ley para que sea «la política» la que pague la parte del ajuste del gasto público que Milei quiere diseñar desde ahora hasta el 10 de diciembre.¿Y el Presupuesto?
Milei ya le había adelantado a Sergio Massa que debía considerar la posibilidad de cambios en el Proyecto inicial cuando el ministro envió al Congreso una Adenda para compensar a las provincias por los cambios en la deducción del IVA en las compras de la canasta básica.
Por esa adenda, el conjunto de las provincias recibiría 2,9 billones en 2024 para compensar la deducción del IVA incorporando a la masa coparticipable el 25% de los ingresos por el impuesto a los débitos y créditos bancarios y el 35% del impuesto País. ¿Tendrá algo para decir Milei sobre esa compensación?
Respecto de Luis Caputo, sus allegados insisten en que su decisión es no volver a ocupar cargos públicos, basándose en que su entorno familiar pasó momentos difíciles en su anterior gestión.
Sin embargo, hay versiones que indican que es Caputo el encargado de elaborar un plan financiero para restablecer el acuerdo con el FMI y lograr el aporte de US$ 15.000 millones del organismo e intentar conseguir otros US$ 15.000 millones en el mercado.
Unos US$ 30.000 millones son los que calcula Emilio Ocampo como respaldo para pensar en implementar una dolarización.
Sin una cantidad importante de dólares, y en eso coincide Horacio Liendo, la dolarización resultaría inviable.
La gambeta a la dolarización que anoche hizo el Presidente electo sería una señal en el sentido de que primero buscará el equilibrio de las cuentas públicas para evitar el déficit y la emisión antes de encarar algún tipo de esquema bimonetario. Claro que los mercados, como es habitual, buscarán adelantarse.