La inversión privada en el primer año de Javier Milei en la presidencia fue la más baja en décadas y mostró una caída de 13,7 por ciento internual en el período. Estos números, según publicó en su momento el economista y ex socio del Presidente, Diego Giacomini, ponen a la gestión libertaria como la que menos capitales privados captó desde 2001 a la fecha. Todo a pesar de las liberaciones de controles y beneficios fiscales que el Gobierno Nacional les dio a las empresas.
El dato de caída en las inversiones es parte de un informe de la consultora Orlando Ferreres y Asociados, que además reportó un alza en los desembolsos en el mes de diciembre de 19,9 por ciento, sin descontar inflación. El dato es interesante porque es el primer mes de suba, dado que ya compara con el desplome de inversiones que se vio en diciembre del 2023, primer mes de Milei Presidente. Todos los otros meses del año pasado, desde enero a noviembre, hubo bajas superiores al 20 por ciento interanual. De hecho, el informe de Ferreres destaca que esto se da luego de anotar once caídas mensuales interanuales.
«El principal motivo de esta suba es la baja base de comparación que dejaron las importaciones de bienes de capital en diciembre de 2023, llevando a las cantidades importadas de este rubro a anotar un aumento de 87,5%. Una similar situación de baja base de comparación se verifica en la inversión en construcción y en la adquisición de equipos y maquinaria de origen local», destacó el informe del economista.
Por otra parte, el documento detalla que la medición sin estacionalidad también muestra un avance en diciembre respecto al mes anterior. En cuanto a las expectativas a 2025, se espera una mejora en la inversión especialmente en la importación de maquinaria mientras que para el sector de la construcción, el dólar «atrasado» representa una traba para el sector.
«Vale destacar que la baja del riesgo país será un factor importante que alentará la entrada de inversiones, junto con la recuperación de la actividad económica, la mejora de los salarios y el fomento gubernamental de la mano del RIGI», agregan desde Ferreres.
Qué dice cada sector
Naturalmente, la fuerte recesión por la que se transitó en 2024, generó cautela en los empresarios a la hora de poner dinero y apostar. Los rubros más golpeados, naturalmente, fueron la industria, el consumo y la construcción, los tres sectores relegados por la política oficial. Además, son los que menos están facturando y los que más capacidad ociosa tienen. Ergo, en el caso de que la actividad repunte, serán pocos los que harán inversiones y muchos los que utilizarán las máquinas y capacidades que tenían fuera del ring.
En este contexto, hay alguno sectores que es interesante observar, por diferentes razones. Por un lado, Maquinaria y equipos, rubro en el cual la inversión registró durante diciembre una excepcional suba de 49,7% en la comparación interanual, impulsado por un aumento de 87,5% de las cantidades importadas de bienes de capital que anunció el INDEC para el último mes del año.
Por su parte, la inversión en equipos nacionales creció 17,7%. De este modo, para el acumulado del año 2024, la división anota una caída de 6,1% respecto de 2023.
Las malas noticias, por cuestiones obvias, siguen estando en el sector de los ladrillos y el cemento. En el sector de la Construcción, siempre de acuerdo al índice que elabora Orlando Ferreres, la inversión se contrajo en diciembre 4,2%, mostrando por cuarto mes consecutivo una desaceleración en su tasa de caída, y dejando el total de 2024 con una contracción de 21,6% en relación al año anterior.