Un fósil de dinosaurio hallado en China, exquisitamente conservado incluso en diversas estructuras de su laringe, sugiere que los sonidos que producían estas criaturas no eran similares a los rugidos indicados por el cine o la literatura: por el contrario, podrían haber emitido chirridos semejantes a los que identifican a las aves.
El hallazgo de un fósil en el noreste de China sugiere que algunas variedades de dinosaurios no emitían el clásico rugido, que ha quedado eternizado en el inconsciente colectivo gracias a los films, sino más bien sonidos agudos y muy parecidos a los que producen las aves en la actualidad.
El espécimen, asignado a una nueva variedad llamada Pulaosaurus qinglong, fue recuperado en la Formación Tiaojishan, en la provincia de Hebei. Se trata de un ejemplar juvenil de apenas 60 centímetros de largo, fechado hace entre 165 y 150 millones de años, en el ambiente lacustre y boscoso de esa zona durante el Jurásico Medio-Tardío.
El punto clave: la preservación de la laringe
El aspecto más sorprendente de este fósil, que se ha preservado casi a la perfección, es la conservación de elementos de la laringe. Entre los restos óseos aparecieron dos huesos hioides, que presentan forma alargada y delgada, con estructuras muy similares a las de las aves modernas. Esta característica es extremadamente rara en dinosaurios no aviares.
Según un estudio publicado en la revista PeerJ y liderado por el Dr. Xing Xu, del Instituto de Paleontología y Paleoantropología de Vertebrados de la Academia China de Ciencias, el análisis comparativo de esas estructuras óseas reveló rasgos funcionales claros: al ser alargadas, ofrecían un punto de anclaje amplio para músculos dilatadores de la glotis.
En las aves actuales, esas configuraciones facilitan movimientos rápidos y precisos durante la fonación, modulando el sonido de una forma característica. En Pulaosaurus, ese diseño sugiere que el dinosaurio poseía un sistema de fonación más parecido al de las aves contemporáneas, y no las condiciones esperables en un reptil rugiente.
Nuevas relaciones entre dinosaurios y aves
Los investigadores emplearon tomografías computarizadas y reconstrucciones 3D para modelar la laringe del dinosaurio, y compararla con la de aves y cocodrilos vivos. Según informa Phys.org, concluyeron que, en lugar de rugir, este dinosaurio habría emitido chirridos, trinos y quizás llamadas cortas, en un estilo similar al de los pájaros cantores actuales.
Referencia
A new neornithischian dinosaur from the Upper Jurassic Tiaojishan Formation of northern China. Yunfeng Yang et al. PeerJ (2025). DOI:https://doi.org/10.7717/peerj.19664
Este hallazgo reafirma la idea en torno a que muchos dinosaurios, especialmente los herbívoros, tenían adaptaciones vocales avanzadas, de acuerdo a un artículo publicado en Sci.News. Anteriormente, los estudios en esa zona y durante ese período se habían focalizado en pequeños terópodos y las primeras aves: ahora, Pulaosaurus aporta la primera evidencia de dinosaurios de este tipo en esa región y amplía nuestra comprensión de su diversidad ecológica y de comportamientos.
Al mismo tiempo, el descubrimiento abre nuevas líneas de investigación sobre la evolución de la voz y la relación entre estructuras óseas, músculos y sonidos. Revela que los dinosaurios compartían con las aves características de la comunicación acústica, implicadas en la necesidad de atraer pareja, defender territorio o advertir de peligros.