San Lorenzo no tiene grises. Puede pasar de tener al plantel en huelga por falta de pago a pelear el Apertura hasta semifinales, de estar inhibido o negociar con jugadores internacionales y hasta haber tenido hasta hace poquito a una figura española en sus filas. El cielo y el infierno se entremezlcan y el Santo va aferrado al recuerdo del Papa Francisco pero, a la vez, rodeado de diablillos y diabluras. En ese mar de contradicciones en el que el club está inmerso desde hace rato, El presidente en licencia luego de haber sido denunciado públicamente por corrupción, Marcelo Moretti, pasa de presionar para volver a ejercer el máximo cargo a estar al borde de la destitución como directivo y como socio…
Sí, así de extremo. Es que luego de que afirmara que levantaría su licencia para volver a la presidencia hace apenas unos días, este lunes el Tribunal de Ética y Disciplina dictaminará por seis votos contra uno un pedido totalmente condenatorio. “Solicitar a la Asamblea de Representantes la destitución de Marcelo Luis Ángel Moretti en su actual cargo de presidente, su inhabilitación absoluta para ejercer cargos electivos y/o actuar en comisiones, departamentos del club o ser asesor y la expulsión en su calidad de socio”, dice la parte más importante del dictamen que argumenta que la medida es porque entiende que es responsable de cometer “infracciones muy graves” al Estatuto Social del club.
Claro que la ejecución no es inmediata: en el mismo escrito, el Tribunal recomendó a la Comisión Directiva que suspenda a Moretti en el ejercicio de sus funciones provisoriamente hasta que se expida la Asamblea. Ahora, la pelota la tiene la CD, que deberá convocar a una reunión (la última fue el 8/5 cuando asumió la presidencia interinamente Julio Lopardo) para tomar cartas en el asunto. Allí los directivos pueden suspenderlo como directivo, tal como recomendó el Tribunal, y deberían hacer el llamado a Asamblea para que trate el tema.
Ahí empezará otra partida en el ajedrez político del Ciclón. Es que hay 90 asambleístas de los cuales 60 pertenecen a Boedo en Acción (la agrupación de Moretti) y el resto a la oposición: 14 de Orden y Progreso (que tiene a Marcelo Culotta como líder), 11 de Por Amor a San Lorenzo (responden a Sergio Costantino) y 5 a Volver a San Lorenzo (el grupo de César Francis) y el caso requiere del voto positivo de 3/4 partes del total (no de los presentes el día que se realice la Asamblea), por lo cual debiera haber 38 asambleístas por el oficialismo, la agrupación de Moretti, que voten a favor del dictamen del Tribunal para que la medida se lleve a cabo.
En el medio, hay artilugios legales que pueden demorar o incluso hasta frenar la situación. En las últimas horas se rumoreó que Moretti (nadie de su entorno desmintió ni confirmó) podría presentar un amparo e incluso denunciar a los miembros del Tribunal, lo que podría dejar el dictamen en stand by, a la espera de una resolución de la IGJ. Más allá de cómo siga la historia y luego de que el propio Lopardo, quien ocupa el sillón ante su licencia, reconoció públicamente que le pidió la renuncia, ahora a Moretti lo tiraron al Tribunal…
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