Las telas que tenemos en nuestros hogares, desde toallas y sábanas de algodón natural hasta ropa fabricada con materiales sintéticos, producen fibras microscópicas a medida que se descomponen con el tiempo. Investigaciones anteriores ya habían demostrado que las lavadoras domésticas capturan primero estas microfibras y las liberan después al medio ambiente. Pero no solo las lavadoras realizan este preocupante proceso; ahora un nuevo estudio ha demostrado que las rejillas de ventilación de las secadoras también producen microfibras con un uso doméstico normal.
La investigación, publicada en Environmental Toxicology and Chemistry, estima que las secadoras domésticas liberan más de 3.500 toneladas métricas de microfibras cada año solo en EE UU, lo que equivale a aproximadamente 30 veces el peso de la Estatua de la Libertad.
Recolectando microfibras en los hogares
Los científicos del Desert Research Institute (Reno, Nevada, EEUU) colaboraron con la ONG ambiental Keep Tahoe Blue para reclutar voluntarios de la región del Lago Tahoe para este estudio. Los voluntarios instalaron un sistema de recolección de malla en el exterior de las rejillas de ventilación de sus secadoras domésticas durante tres semanas y reportaron información sobre los materiales introducidos en cada carga de secado.
Microfibras detectadas durante la investigación / DRI
Los resultados demostraron que las secadoras domésticas son fuentes importantes de microfibras tanto naturales (por ejemplo, algodón) como sintéticas, las cuales pueden transportar al medio ambiente los productos químicos y tintes utilizados para su tratamiento.
«Este estudio amplía nuestra comprensión de cómo se degradan los textiles en condiciones domésticas típicas», afirmó Mónica Arienzo, directora del Laboratorio de Microplásticos y Química Ambiental del DRI y autora principal de la investigación. «Dada la ubicuidad de las microfibras y su capacidad de introducir otras sustancias químicas en el medio ambiente, es importante que comprendamos cómo reducirlas en origen. Las secadoras domésticas podrían ser un método sencillo para abordar este problema».
Fibras teñidas con químicos
Las telas sintéticas, como el poliéster, el nailon y el spandex, se descomponen en microplásticos con el tiempo. El problema es importante porque este tipo de tejidos representó más de la mitad de la producción mundial de telas en 2023. Tanto las fibras sintéticas como las naturales, como el algodón, la lana y la seda, suelen tratarse con una amplia variedad de compuestos químicos, como tintes, retardantes de llama, sustancias PFAS para repeler el agua y formaldehído para lograr telas sin arrugas. Los científicos aún se encuentran en las etapas iniciales de la investigación de los impactos ambientales y en la salud humana que provocan estas sustancias químicas, incluyendo efectos en la salud reproductiva y del desarrollo.
Mujer introduciendo ropa en una secadora doméstica / Agencias
Tanto los procesos de lavado como de secado producen microfibras. Las lavadoras las introducen en las aguas residuales y las secadoras las lanzan directamente al aire. La mayoría de las secadoras son de tambor: expulsan el aire caliente al exterior del edificio y no tienen filtro para atrapar las microfibras al margen del filtro de pelusas. Otros tipos de secadoras, como las de condensación y las de bomba de calor, son más comunes en otros países y pueden tener emisiones diferentes.
Seis voluntarios instalaron cubiertas de malla sobre las rejillas de ventilación de sus secadoras para la investigación. Luego enviaron estas cubiertas por correo a DRI para su análisis, donde Arienzo y su equipo registraron el peso total de cada una y analizaron su composición química. Durante el período de estudio, se registraron un total de 76 cargas de secadora, y otras 38 en hogares que no instalaron las cubiertas de malla. Para cada carga, se registraron los dos artículos más grandes y sus materiales, siendo las toallas, los pantalones y las sábanas los más comunes y de mayor tamaño.
Las rejillas de ventilación lanzan micropartículas al aire / Agencias
Los materiales más comunes detectados fueron algodón y poliéster o vellón. Las microfibras de fibras naturales como el algodón fueron las más frecuentemente detectadas en las cubiertas de malla de ventilación de la secadora que las de fibras sintéticas.
3.543 toneladas de microfibras solo en EEUU
Teniendo en cuenta que hay más de 82 millones de secadoras eléctricas en EE UU, los investigadores estiman que todas ellas liberan 3.543 toneladas métricas de microfibras cada año en dicho país. Basándose en su análisis de las cubiertas de malla de ventilación de la secadora, estiman que 2.728 toneladas métricas provienen de telas naturales, mientras que 460 toneladas métricas proceden de telas sintéticas.
«Esta investigación, impulsada por voluntarios, amplía nuestro conocimiento sobre las fuentes de contaminación, como los conductos de ventilación de las secadoras, que pueden afectar los ecosistemas de los que dependemos», afirmó Marilee Movius, Gerente de Recreación Sostenible de Keep Tahoe Blue. «También nos muestra cómo pequeños cambios de comportamiento, como instalar filtros de pelusa más eficientes o secar la ropa al aire, pueden reducir las emisiones de microfibras y proteger el medio ambiente y a nosotros mismos», añadió.