La Policia Nacional ha desmantelado una importante red internacional de narcotraficantes que se habían instalado en Madrid y otros puntos de España. Hay al menos 12 detenidos en Madrid, Valencia y Talavera de la Reina (Toledo), y se han recuperado más de 1.200 kilos de cocaína y 368 kilos de metanfetamina, según ha sabido el canal de investigación y sucesos de Prensa Ibérica.
Se trata, según la investigación dirigida por el juzgado número 2 de la Audiencia Nacional, de una alianza de narcos colombianos, mexicanos y españoles que introducían «grandes cargamentos de cocaína» en España y «distintos países europeos».
Grúas cargadas de droga
La organización, dirigida por dos hombres colombianos, padre e hijo, habría introducido en España 1.700 kilos de cocaína en dos partidas diferentes. Según ha podido saber este medio, cuatro ciudadanos mexicanos se encargaban de custodiar y almacenar la droga. Otros tres integrantes de la red, estos colombianos, distribuían la cocaína por España.
La droga se guardaba, según las investigaciones de la UDYCO Central de la Policía Nacional, en dos naves de la localidad de Cenicientos (Madrid), propiedad de un empresario español al que se considera el responsable de la organización logística de la red de narcos. La cocaína se camuflaba en «maquinaria industrial de gran tonelaje», como grúas. Esas grúas cargadas de droga eran llevadas a otra nave de Talavera de la Reina (Toledo). En esas dos naves la Policía recuperó ayer más de una tonelada de cocaína y 368 kilos de metanfetamina ocultos en la maquinaria industrial.
Fincas aisladas en la sierra
La droga era trasladada por el grupo mexicano a «fincas aisladas en las sierras de Ávila y Madrid». Desde una de esas fincas, en La Adrada, se enviaba después algunas partidas ocultas en furgonetas hacia Bilbao y Valencia. La Policía recuperó 30 kilos de una de esas furgonetas cargadas el pasado mes de junio cuando iba en dirección a la capital levantina.
La red desmantelada ahora también enviaba la cocaína que llegaba a España hacia otros países europeos. De hecho, la Policía descubrió que mantuvieron reuniones con un responsable del clan Amato-Pagano de la Camorra italiana (los grupos mafiosos de Nápoles). El método era similar, ocultar la cocaína dentro de maquinaria industrial. El mafioso italiano tambien ha sido detenido y el juez ordenó ayer su ingreso en prisión. Se le acusa de ser el enlace encargado de negociar y coordinar los cargamentos de cocaína enviados desde España a Italia.