No hay dudas de que Art Attack fue uno de los programas de manualidades más populares a nivel mundial. Emitido desde 1990 hasta 2007, el ciclo británico tuvo tal impacto que no tardó en tener su versión latinoamericana, la misma que llevó al estrellato a Rui Torres, el presentador mexicano que falleció de manera repentina en 2008, cuando tenía solo 32 años.
Sin embargo, no solo el carismático conductor se llevó el reconocimiento de los televidentes, sino también Alexiev Gandman, el argentino que se encargaba de hacer grandes obras sobre el suelo.
En una entrevista con el ciclo de streaming Al borde del colapso, el ilustrador y escritor infantil sorprendió al revelar el detrás de escena del famoso ciclo que se transmitía por Disney Channel. “¿Nadie te toquetea tu arte, no?“, le preguntaron al respecto. “No era un toqueteo, lo que pasa que bueno, yo traía las ideas generalmente y muchas veces se discutía. Tenía todo un trabajo porque yo te representaba 100, 120 ideas y se aprobaban las 27 que iban a estar en la temporada», comentó el artista, quien en diálogo con LA NACION, profundizó: “Originariamente, ellos (Disney) me llamaron para ser director de arte del proyecto, que de hecho lo fui en la temporada uno y dos”.
En ese sentido, explicó que desde la producción llamaron a ciertos actores, pero que era un desafío dibujar sobre el suelo con azúcar o brillantina, ya que se trata de materiales que no son estáticos y tienden a esparcirse fácilmente. “Después de tres meses, me propusieron estar al frente… Al momento fue todo un desafío porque yo no tenía ningún tipo de expectativa, ni me interesaba trabajar en la tele, pero siempre me gustó tirarme a la pileta, así que dije que sí”, se sinceró.
Según contó en el programa que se transmite en lunes y jueves a las 18.30 a través de YouTube, desde la producción le decían: “‘Mirá, lo vamos a grabar en tal lugar y a vos te va a pasar tal cosa’. Entonces, imaginaba qué universo de materiales podía encontrar en ese lugar. No era lo mismo hacerlo en una granja, que hacerlo en un negocio de tal cosa, que hacerlo en una escuela, que hacerlo en el jardín japonés”.
Pero, ¿cómo fue que le llegó la propuesta para formar parte del segmento infantil? Un día recibió un mail de Disney, el cual tuvo que leer tres veces porque no creía que fuera cierto. “Yo ya tenía varios libros publicados, y con editoriales siempre tenía contacto, pero nunca con un canal de televisión. En el tiempo que me tardé en contestar, me llamaron por teléfono”, le manifestó a este medio.
Sobre su experiencia, Gandman aseguró: “Para mí fue súper productivo, aprendí muchísimo, me divertí y crecí mucho como profesional. Quizás algunas expectativas que uno tiene no se cumplieron desde ese lugar, por ejemplo, que después de esto mis libros se vendieran mucho más, ya que poca gente me asocia a ello. Sin embargo, independientemente de eso, me va muy bien”.
El recorte que circuló en redes no tardó en generar impacto entre los seguidores del canal de streaming, muchos de los cuales acababan de descubrir la nacionalidad de Gandman.
“¿Vos me estás diciendo que él es argentino? Vivimos coronados de gloria“; ”Estamos en todos lados. Me explota la sangre albiceleste»; “Jajaja estamos todos en la misma, flasheando con que era de Argentina. Sin dudas esa sección era lo mejor del programa, su creatividad era alucinante” y “Empachados estamos de ser tan buenos en todo, hermano”, fueron solo algunos de los mensajes que se destacaron.
A raíz de esto, el ilustrador subrayó: “Me llega el cariño, es fuerte, sobre todo, quizás de Argentina, que no saben que yo era de acá, pero me escriben hindúes, paquistaníes. Hace unos años, fui a hacer un trabajo de publicidad a Marruecos y ahí era los Rolling Stone, bajé y toda la gente estaba esperándome, como desesperada… Me quedé y dije: ‘¿Qué es esto?’. Porque acá camino por la calle y ni se enteran de que estoy acá“.
Cabe destacar que fue Neil Buchanan, creador, escritor, conductor y productor del ciclo, fue quien comenzó con aquellos “atacazos artísticos”. La idea original del programa se le ocurrió a Buchanan y a su compañero de la productora TVS Tim Edmunds. Vio el aire en 1989 a través del canal ITV, y tuvo tanto éxito que en 1998 Disney compró los derechos para lanzar al extranjero versiones dobladas en distintos idiomas.