La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha criticado la ausencia de un plan por parte del Gobierno para actuar ante los aranceles impuestos por la adminstración de Donald Trump, actualmente congelados, y ha asegurado que el viaje del ministro de Economía, Carlos Cuerpo, a Estados Unidos se debe a la necesidad de «arreglar el desaguisado» que ha provocado Pedro Sánchez con su viaje a China la última semana.
En una comparecencia celebrada en Málaga, Gamarra ha denunciado que el Ejecutivo se va a enfrentar a las consecuencias de los aranceles sin tener un Presupuesto actualizado que le permita «afrontar con políticas de verdad» lo que necesitan los españoles. Y, a renglón seguido, ha dicho que el Gobierno debería contar también con «una diplomacia inteligente«, sin que «nadie vaya haciendo la guerra por su cuenta al margen de la Unión Europea», en referencia a la visita que efectuó Sánchez a China y Vietnam.
En este punto, Gamarra ha señalado que Cuerpo ha tenido que visitar Estados Unidos para «intentar arreglar el desaguisado» del «viaje imprudente» de Sánchez. Justamente, el ministro de Economía español se reunirá este martes con el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, el mismo que advirtió a España de que un posible acercamiento a China sería «como cortarse el pescuezo». El encuentro se producirá cuatro días después de que el propio Sánchez calificara al gigante asiático de «socio imprescindible» para «hacer frente a desafíos globales».
La corrupción y el CIS
Además, en la tónica habitual de las intervenciones de los dirigentes del PP, Gamarra ha afirmado que el Ejecutivo está en un «ambiente asfixiante de corrupción» y que la única salida es «la convocatoria de elecciones». Un adelanto electoral que el Vicesecretario General de Política Autonómica, Elías Bendodo, cree que se producirá próximamente a la vista de los resultados del último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) que sitúa al PSOE cinco puntos por encima del PP.
«A Sánchez le quedan dos cosas, la ideología que aplica en detrimento de la calidad de vida de los españoles y un CIS trucado. Si fuera verdad el CIS, Sánchez convocaría elecciones», ha sentenciado Bendodo.