Tim Thibault, un exagente del FBI que trabajaba en la Oficina de Campo de Washington (WFO), está siendo investigado por compartir indebidamente información confidencial de investigaciones y detalles sensibles con personas ajenas al FBI a través de su correo electrónico oficial.
Según correos electrónicos obtenidos por los senadores republicanos Chuck Grassley (Republicano-Iowa) y Ron Johnson (Republicano-Wisconsin.), Thibault también envió fotos privadas, incluidas imágenes desnudas de su novia, mientras trabajaba en la agencia.
Estas revelaciones surgieron tras la denuncia de un denunciante anónimo y fueron expuestas en una carta dirigida al director del FBI, Kash Patel, y a la fiscal general, Pam Bondi, exigiendo una investigación inmediata.
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Entre febrero y mayo de 2022, en plena administración Biden, Thibault envió varios correos electrónicos a su pareja, Melissa Morgan-Ransome, en los cuales compartía documentos oficiales del FBI, incluyendo nombres de empleados y detalles sensibles de investigaciones en curso.
En uno de los correos, incluso incluyó una imagen desnuda de su pareja, enviada tanto a ella como a una dirección de correo electrónico vinculada a la Universidad George Washington.
Además, los correos contenían un descargo de responsabilidad que advertía sobre la naturaleza confidencial de los documentos, que no debían ser compartidos con el público.
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Uno de los correos detallaba información sobre una investigación federal relacionada con Lauren Handy, una activista anti-aborto, lo que indicaría que Thibault estaba compartiendo información de investigaciones en curso sin la debida autorización.
La conducta de Thibault se produce en medio de una serie de acusaciones más graves sobre su implicación en lo que los senadores republicanos consideran acertadamente un grave intento de proteger a Hunter Biden, el hijo del presidente Joe Biden, de una investigación federal.
Según las acusaciones, Thibault y Brian Auten, un analista supervisor de inteligencia, participaron en un esfuerzo para desacreditar información que podría ser perjudicial para Hunter Biden, sugiriendo falsamente que se trataba de «desinformación».
Además, Thibault había sido el encargado de gestionar la evidencia entregada por Tony Bobulinski, un ex asociado de negocios de Hunter Biden, sobre un acuerdo con una empresa energética china que involucraba a Biden y su hermano James.
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Los senadores Grassley y Johnson solicitaron una investigación para determinar si las acciones de Thibault podrían haber creado un ambiente de trabajo hostil o constituir acoso sexual.
También pidieron que se identificara a cualquier otra persona involucrada en sus actividades inapropiadas y que se revelaran todas las comunicaciones entre Thibault y su pareja, quien tenía un perfil en redes sociales vinculado a su trabajo como instructora de fitness en Florida.
Además de las acusaciones de mala conducta profesional, se destaca el comportamiento «despreocupado» de Thibault en las redes sociales.
En varios tuits, respondió a críticas del presidente Donald Trump y un sacerdote católico opuesto al aborto con comentarios despectivos, lo que refuerza las preocupaciones sobre su imparcialidad y ética profesional.
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En su puesto en el FBI, Thibault también fue señalado por su aparente parcialidad política y simpatía con el Partido Demócrata, lo que ha generado controversia dentro y fuera de la agencia.
El 2022, después de que surgieran las acusaciones, Thibault renunció al FBI, pero las revelaciones continúan alimentando un debate sobre la integridad del proceso investigativo dentro de la agencia y las preocupaciones sobre posibles sesgos en investigaciones de alto perfil, como las que involucran a la familia Biden.
Los senadores republicanos también expresaron su frustración por la falta de transparencia del FBI en cuanto a la divulgación de información y su renuencia a compartir detalles sobre investigaciones en curso con el Congreso, mientras que Thibault aparentemente compartía dicha información con su pareja privada.
La respuesta del FBI y el Departamento de Justicia ha sido limitada, sin comentarios públicos adicionales hasta el momento, mientras los senadores insisten en la necesidad de una investigación interna exhaustiva.
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