El comienzo de un nuevo año es siempre una oportunidad para frenar por un instante, pensar en lo que venimos haciendo, mirar a nuestro alrededor y planear lo que vamos a hacer en los próximos meses. También es un punto de inflexión para las modas y una etapa de renovaciones.
El interiorismo no es ajeno a este proceso y ya tiene pensado cuáles serán las tendencias para el 2025. ¡Edisur te cuenta las principales!
Elegancia y naturaleza
Uno de los protagonistas del 2025 será el estilo molcajete, una tendencia de interiorismo que se caracteriza por el uso de tonos oscuros como negro, grises profundos y toques de café. Se inspira en las culturas ancestrales y se enfoca en la elegancia y la textura natural.
Algunas características son el uso de piedras volcánicas y fibras de vidrio para crear mesas robustas y naturales, las lámparas colgantes y las piezas de mobiliario con formas y acabados contemporáneos.
Para crear un ambiente acogedor y especial, se pueden colocar velas aromáticas en los baños, salas de estar y dormitorios. Para generar un verdadero contraste, los amarillos vibrantes y dorados son la opción ideal.
Calidez, frescura y teatralidad
Otra de las grandes tendencias que veremos este año es el terracota, que se caracteriza por la utilización de un color cálido y acogedor que se mezcla entre el marrón y el rojo. Se puede combinar con otros tonos para lograr diferentes efectos, como calidez, frescura o teatralidad.
Se pueden sumar materiales naturales como revestimientos de barro, ladrillos vistos, muebles de madera y detalles de artesanía en cerámica. También se pueden añadir texturas con carácter, acabados sin tratar o con efecto mate.
Una estética digital en el mundo real
La Generación Z se apodera de la cultura y de las tendencias de interiores. El diseño de mobiliario divertido, colorido y lúdico se ve cada vez más, con elementos funcionales que parecen tomados de una caricatura de los años noventa y principios de los dos mil.
El estilo blob es la combinación de una estética digital con el mundo real. El uso de iridiscencias, los objetos de metal y las transparencias son clave para lograr espacios que fusionan la nostalgia con la modernidad.
Curiosamente, el uso del plástico añade un toque de lujo y no pueden faltar el terciopelo, el mármol blanco y el acrílico colorido.
Un descubrimiento sensorial de texturas y sensaciones
En conclusión, estamos ante una transición de diseño de mobiliario tradicional a propuestas mucho más innovadoras y contemporáneas.
Este cambio no es una casualidad, ya que estamos a mitad de la década hacia 2030, con un efecto que ya se había visto en los años cuarenta: un descubrimiento sensorial de texturas y sensaciones cuyo origen se encuentra en los materiales naturales, la referencia de las culturas ancestrales, las transparencias y la simulación a través de plásticos.
#DatoEdisur: Cuáles son las tendencias que no pueden faltar en tu casa